La patata y su larga historia.
La patata ya es imprescindible en nuestra gastronomía
La patata es un ingrediente obligado para algunos platos típicos de la gastronomía española y de otras culturas europeas. Y es que este tubérculo tiene unos cuantos siglos de existencia, y ha formado parte de las recetas milenarias de muchas culturas. La patata tiene una larga historia, que algunos historiadores sitúan incluso hace unos 8000 años a.C.
En Islanet sabemos que el origen de la patata, batata o papa según el lugar geográfico en el cual nos encontremos, tiene su origen en la región andina perteneciente a lo que hoy es el Perú y el noreste de Bolivia. Fue en esta parte de América que se dieron los primeros cultivos de este famoso tubérculo, que hoy día se ha convertido en un ingrediente básico en las distintas cocinas alrededor del mundo.
Hombre, y es que algunos platos son de lo más elementales si no se les agrega patatas en ellos. Un buen asado de carne sin papás puede resultar incompleto, y a quien no le gustan unas populares patatas fritas cortadas a la francesa. O incluso un simple puré es clásico solo si esta hecho de patata. Son tantas las recetas que la incluyen, y tan sabrosa su textura y sabor, que forma parte de muchas culturas de forma natural como si se cultivase en todo el globo.
Pero desde el principio, fue un tubérculo oriundo de América del Sur, que solo fué adaptado a otras tierras a través de los siglos, modificando su resistencia a distintos tipos de climas y latitudes. En la zona andina se destinaban los terrenos de mayor altitud para su siembra, mientras los más cálidos se reservaron para el cultivo del maíz. Y de seguro te debes preguntar, ¿cómo llegó a Europa?
De América del Sur a Europa.
Pocas referencias se tienen con exactitud de cómo llegó la patata al viejo continente, pues los historiadores de siglos pasados, la confundían con otros tubérculos cultivados en América como el ñame. Pero se sabe que los primeros exploradores europeos en la región andina se toparon con la patata. Y como la encontraron sabrosa, cargaban con grandes provisiones de ella durante sus largos viajes en el mar.
Las primeras referencias bibliográficas de la llegada de la patata a España, data de mediados del siglo XVI. Es por esta época que empieza a cultivarse la raíz de la patata en la Península Ibérica, traída por los exploradores de América del Sur. Pronto se hizo popular hacer regalos exóticos entre las personalidades de poder de aquel tiempo. De la Casa real española al Papa en Roma, y de ahí a las manos de cualquier botánico en Viena, la patata se distribuiría por toda Europa.
Pronto la población europea comenzó a admirar la flor de la patata, pero su raíz era considerada venenosa, y se destinaba solo a la alimentación de los cerdos o indigentes. Los marineros sabían bien su uso, y serían ellos quienes popularizaron su consumo entre la sociedad. Cargaban con grandes cantidades de patata a sus largos viajes de exploración a otros continentes.
De Europa al Resto del Mundo.
Los viajes de exploración sirvieron para que la patata pasara de Europa, a la India, China y el Japón en el siglo XVII. Sería conocida en el resto del mundo. En el hemisferio norte, su cultivo tardaría más en ser adaptado por las condiciones climáticas y los duros inviernos. Y con el pasar del tiempo surgieron nuevas variedades de la patata original. Entre ellas “la papa irlandesa”, que se adaptó a los suelos húmedos y al clima frío, y que luego los colonos llevaron consigo hacia América del Norte.
Pero no sería hasta entrado el siglo XVIII cuando por fin se aceptara su consumo de modo regular, y sirviese para garantizar la seguridad alimentaria de muchos países europeos. Después de las grandes hambrunas que azotaron a la población cerca de 1780, Federico de Prusia ordenó a sus campesinos cultivarla, y siguieron su ejemplo otros reyes.
Mientras los científicos se encargaron de avalar que era “comestible”. La patata serviría para asegurar la comida en las mesas, si los cultivos de cereales sufrían inconvenientes. El colonialismo y la emigración europea se encargarían de llevar la patata a todos los rincones del planeta. Una propagación que no tendría vuelta atrás.
Mayor demanda de Patatas.
Ya para el siglo XIX y XX era popular el comer patatas de distintas maneras, en distintos países. Aproximadamente en 1920 se creó el primer pelador mecánico, que serviría para facilitar la extracción de su piel. La demanda de patatas sería exponencial en países en desarrollo como la India, China y Bangladesh.
La historia de la patata resulta muy interesante, y todo el camino que ha recorrido. Hoy día no podemos imaginar una lista de la compra que no incluya este tubérculo. Gracias a ella, podemos disfrutar de muchos platos hechos de sus distintas variedades.
por Artículos y Noticias Islanet.es
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